Colecho, ¿A favor o en contra?

Hoy os voy a hablar de un tema que suele generar polémica: el colecho

Para quien no sepa de que va el tema, el colecho consiste básicamente en compartir la cama con el bebé. Se ha demostrado que, siempre que se practique de forma segura aporta muchos beneficios para el bebé.

Familia colechando

Entre los beneficios que aporta destacan un mayor descanso del bebé, reduce la tasa de muerte súbita del lactante, favorece la lactancia materna, si se alimenta con lactancia materna la madre también descansa más puesto que no tiene que levantarse para dar de comer al niño, se refuerza el vínculo con los padres, menor nivel de estrés, menos lloros y mejor desarrollo emocional.


Para que el colecho sea seguro se recomienda que ninguno de los padres fume, ni tengan obesidad, ni tomen drogas, somníferos ni cualquier sustancia capaz de dejarnos sumidos en un profundo sueño para evitar el riesgo de poder aplastar al bebé. Tampoco se recomienda practicarlo con menores de 3 meses, supongo que por el mismo motivo. Por último, lo mejor hasta que el niño empieza a moverse es que duerma al lado de la madre, ya que en general las madres después de parir tenemos el sueño más ligero y una especie de instinto con el que notamos el más mínimo movimiento del bebé, pero una vez que ya se mueve es mejor que duerma entre medias de los dos padres (o de uno de ellos y una pared) para evitar que el niño se caiga de la cama, que creedme que pasa, pero eso ya os lo contaré en otro momento.

Otra opción muy buena para tener los beneficios que proporciona el colecho pero evitando riesgos y durmiendo todos un poquito más anchos es adosar a la cama una cuna de colecho o cuna sidecar, que es básicamente una cuna normal a la cual se le quita la barrera que pega a la cama y que se regula la altura a la altura del colchón de nuestra cama.

Cuna de colecho

Nosotros empezamos a practicar el colecho de manera casi accidental. Como buenos chicos educados en los 80 pues eso de meter al niño en la cama con nosotros... ¡por dios, que sacrilegio! nuestro niño iba a dormir en su cuna como se ha hecho toda la vida. Y entonces llega el momento en el que sales del hospital con tu bebé y te vas a casa y descubres que a los colchones de las cunas les deben salir chinchetas cuando dejas al niño porque es soltarle y empezar el festival de lloros y berridos, pero vuelves a probar una y otra vez y, con tal de no meterle en la cama, te vas al sofá e intentas dormirle en tus brazos y te quedas tú dormida sentada en el sofá con el niño con el riesgo de que se te caiga de los brazos. Papá y mamá hacéis turnos para quedaros con el niño y que el otro descanse un poco y...llega el día en que papá vuelve a trabajar porque si, los permisos de paternidad en este país son una vergüenza y a los 15 días, con suerte un poco más si le han dejado cogerse vacaciones, papá vuelve a trabajar y mamá se queda sola en casa con el niño y sin haber dormido y se entra en una espiral de niño llorando, mamá nerviosa, niño llorando más, mamá más nerviosa todavía, que acabas tumbándote en la cama (tu espalda dice que hasta aquí ha llegado y no aguanta más) y metiendo a tu hijo en la cama contigo y curiosamente os dormís los dos un par de horas que os saben a gloria (no más, porque querrá volver a comer), pero piensas: eso está mal, el niño tiene que dormir en su cuna. Así que llega la noche y empieza de nuevo la fiesta.

Entonces llega el día en que mamá tiene que volver a trabajar, y en mi caso trabajo a 50km de mi casa teniendo 45 minutos de coche el día que no hay atasco y es cuando dices: ¡hasta aquí he llegado! me da igual que esté mal o no pero si el niño duerme con nosotros en la cama descansamos todos y si no, se pasa la noche llorando y no dormimos. Y así es como comenzamos a practicar el colecho. Luego empecé a leer sobre los beneficios del colecho y oye, me di cuenta de que a lo mejor tampoco lo estábamos haciendo tan mal, así que con casi 13 meses Hugo sigue durmiendo con nosotros. De vez en cuando duerme un ratito en su cuna (que ya no debe tener tantas chinchetas :P) pero al final siempre acaba durmiendo entre papá y mamá y nosotros encantados, no hay nada como despertarte y ver a tu bebé al lado con una sonrisa de oreja a oreja o que te despierte con un beso. Creo que si algún día Hugo tiene un hermanito haremos colecho desde el principio.

Aún así, sigue siendo un tema un poco tabú y cuando lo hablas con gente, sobre todo los partidarios de un modelo de crianza más "tradicional", o gente más mayor, te miran raro, o te recriminan que no le estás haciendo ningún bien al niño, que le estás malcriando... y bueno, si ves comentarios de la gente por Internet ya ni te cuento, he llegado a leer hasta que te va a dejar el marido porque si metes al niño en la cama, ¿como vas a hacer "vida de pareja"? En fin, a esto último creo que no voy a hacer ningún comentario...cada cual dentro de su casa que haga lo que quiera, pero por favor, respetemos a los que hacen las cosas de forma distinta a las nuestras.

Para terminar, os dejo el enlace a un artículo que nos ha enviado Amaya, una amiga del blog y por el cual me he decidido a escribir este post:
http://www.bebesymas.com/ser-padres/una-conocida-psiquiatra-infantil-receta-a-los-ninos-que-sus-padres-duerman-con-ellos

Ya sabéis que si queréis que hablemos sobre algún tema en particular podéis contactar con nosotros a través de nuestro e-mail: thespanishfamily@gmail.com, nuestra página de Facebook o ahora también en Twitter: @TSpanishFamily

Y vosotros, ¿estáis a favor o en contra del colecho? ¡Dejadnos un comentario!